Agotador trayecto en bus de 8 horas, calor, abarrotado de gente, y pegando codazos al de al lado por ser un "mano larga". Al bajar del bus pillamos un rickshaw que no paro de dar vueltas de un lado a otro atropellando a la penya ya que todos los hoteles estaban llenos. Finalmente nos encontramos con un "Baba" que nos llevo a un hotel y aunque el precio era abusivo Gina estaba por los suelos asi que nos lo quedamos. Luego a resultado ser el hotel mas ruidoso de toda la India, nos vienen a decir que hay agua caliente a las 6 de la manyana, los vecinos se despiertan demasiado pronto y gritan y ponen la tele muy alta, el ascensor habla cada vez que se dejan la puerta abierta (y se la dejan muchas veces...) y una especie de gato que parecia estar en el conducto del aire atrapado. Asi que las noches han sido de todo menos de descanso.
Madurai es una gran ciudad, eso conlleva a que nosotras no esteamos del todo agusto ya que no controlamos nada de lo que pasa y la orientacion se pierde.
Esta ciudad es famosa por sus templos dravidicos, pero al lado de los Chidambaram, estos se quedan muy cortos. Suponemos, que debido a la contaminacion los colores no son iguales, se han oscurecido, y todo parece menos mistico y mas comercial.
Las mujeres aqui, llevan las caras pintadas de amarillo, un amarillo que proviene de una especie de una piedra recubierta de polvos amarillos (mas abajo podreis ver una foto).
Ah! y otra cosa...aqui todo el Hindi que habiamos aprendido en el norte y que tanto nos gustaba ya no sirve de nada, aqui hablan en Tamil, y quien les hable en Hindi les dicen que son de Pakistan...asi que demomento el sur no nos ha convencido mas que el norte, aunque haga calor y estas cosas...ya veremos cuando vayamos a Kerala y empecemos la ruta por esa costa tan playera.
Desde aqui, como ya se acerca el fin de anyo, y realmente queremos pasarlo en la playa, cogemos un tren, al que tanto echamos de menos, que nos llevara a Varkala, en Kerala. Alli hemos encontrado una habitacion razonable que nos permetira vivir entre cocos, palmeras y arena en los pies...y algun que otro masaje ayurvedico caera...es fantastico cada vez que pensamos que es diciembre y podremos gozar nuestro primer fin de anyo sin bufanda, medias y abrigo ah! y el cuerpo blanco y palido, olvidandonos por fin de la ropa y vistiendo con dos cocos y una hoja...nuestra intencion no es dar envidia, sino explicaros lo que sentimos... :P